lunes, 23 de mayo de 2011

Dietas proteinadas

En las últimas semanas no paramos de escuchar los milagrosos resultados de las dietas hiperproteicas. Desde V-NC; tras asistir a un ciclo de conferencias-debates sobre "Alimentación y salud en la actualidad - Revisiones críticas",y dado el interés que la pérdida de peso y las nuevas dietas suscitan; os dejamos con nuestra opinión sobre el tema.

Entre ellas, encontramos la famosa dieta Dukan; el libro del médico francés Pierre Dukan está siendo record de ventas en las librerías españolas. Pero qué hay de cierto en estas dietas? son realmente tan milagrosas como dicen? tienen riesgos para la salud? puede cualquier persona llevar a cabo esta dieta?

Las dietas de alto contenido proteico no son algo nuevo, desde hace ya unos años conocemos los beneficios y las limitaciones que presentan. No dejan de ser dietas hipocalóricas, por lo que la ingesta va a ser menor a lo que la persona está acostumbrada, pero además modifican la proporción de los macronutrientes. Esta modificación, que consiste en comer única y exclusivamente alimentos proteicos (carne, pescado, huevos y lácteos) durante unos días, permite al organismo quemar la grasa que nos sobra, pero no es todo tan fácil. Son dietas que por su bajo, a veces mínimo, contenido en carbohidratos pueden llegar a ser perniciosas e inaceptables por sus riesgos para la salud.

El hecho de no aportar carbohidratos a nuestro organismo hace que entremos en un estado cetogénico. Al no obtener glucosa con los alimentos, nuestro cuerpo la produce a partir de los aminoácidos de los músculos, lo que provoca una pérdida de masa muscular. Esta es la razón por la que las dietas proteínadas deben siempre asegurar un aporte mínimo de carbohidratos.

Las dietas proteinadas deben siempre llevarse a cabo bajo la supervisión de un profesional, un nutricionista que evalúe cómo está siendo la pérdida de peso, y que nos asegure el aporte de kcal y de carbohidratos para conseguir así los beneficios y objetivos.
Este tipo de dietas están indicadas en personas con obesidad (IMC>30), personas con sobrepeso con un porcentaje de grasa elevado, y depósitos de grasa a nivel abdominal. Esta contraindicada en niños y ancianos, embarazadas, personas con problemas hepáticos y renales, y trastornos cardiacos.

Por tanto, para conseguir los beneficios que conlleva una correcta pérdida de peso a partir de grasa podemos utilizar las dietas proteinadas, siempre que estén controladas, que el aporte de carbohidratos sea el correcto, no olvidarnos de la ingesta de agua, y complementar la dieta con ejercicio físico.