miércoles, 20 de marzo de 2013

Bollería industrial vs. bollería casera


Cada vez son más los niños que consumen bollería industrial de forma frecuente en sus dietas. De esta manera estamos contribuyendo a un desarrollo cada vez más rápido del sobrepeso y la obesidad en los niños. Pero, en realidad, son tan malos como dicen estos alimentos??? Sería mejor dar a nuestros hijos algún otro “capricho dulce” casero???

La respuesta es fácil. La bollería industrial es muy calórica, esto significa que nuestros niños están ingiriendo una cantidad elevada de calorías en poco volumen de comida. Además, la calidad de las calorías que se ingieren con estos alimentos, no es la adecuada. Son alimentos muy ricos en azúcares, en grasas, sobretodo saturadas y grasas trans, así como colesterol. Por todo esto, son productos que están en el vértice de la pirámide alimenticia, es decir, su consumo debe ser muy esporádico.

Pero, por qué son tan malos?? Las grasas saturadas que contienen contribuyen a un aumento de los niveles de LDL colesterol (colesterol malo) y de triglicéridos en sangre, así como disminuyen los niveles de HDL colesterol (colesterol bueno), haciendo que la salud cardiovascular sea vea afectada

¿Qué diferencia un bollo casero frente a uno industrial??  A continuación mostramos una tabla con las características de cada uno:

Bollería casera
Bollería industrial
Alimento calórico aunque menos que el industrial (190-220 kcal/ración)
Alimento muy calórico (hasta 400 kcal/ ración)
Contenido en grasa menor
Contenido en grasa muy alto
Calidad de la grasa: grasas de origen vegetal por ejemplo aceite de oliva.
Calidad de la grasa: aceites vegetales palma y coco, muy saturados
Menor contenido en colesterol
Contenido en colesterol alto
No grasas trans
Contenido en grasas trans
Contenido en azúcares alto
Contenido en azúcares alto
Consumo muy esporádico
Consumo muy esporádico
        *Comparativa de bollería casera vs. bollería industrial. Elaboración propia

Dado que no hay que olvidar que este tipo de alimentos les encanta a los niños y que su consumo debe hacerse de forma ocasional, podemos optar por preparar bizcochos en casa para no recurrir a la bollería industrial.

En las próximas semanas, llegan las vacaciones, y con ello disponemos de más tiempo para pasar con nuestros hijos. Una buena forma de inculcarlos una buena educación nutricional, es enseñarlos a preparar alimentos más sanos. Es por esto, por lo que os dejamos una receta, muy sencillita pero muy rica, de un bizcocho de yogur, en mi casa se llama el 3,2,1; podéis usar el yogur del sabor que queráis.
Espero que os guste!!!!

Biscocho de yogur de limón

Ingredientes:
·   1 yogur de limón
·   1 medida de yogur de aceite de oliva
·   2 medidas de yogur de azúcar
·   3 medidas de yogur de harina
·   3 huevos
·   1 sobre de levadura en polvo
·   Mantequilla
Lo primero de todo, pondremos a precalentar el horno a 180ºC. Con un poco de mantequilla, untaremos el molde para así evitar que se nos pegue el bizcocho.
En un bol, mezclamos el yogur, y usarmos el vasito como medida para añadir el resto de ingredientes.  Añadir los 3 vasitos de harina tamizada, los 2 vasitos de azúcar y los 3 huevos. Mezclar bien, y añadir el vasito de aceite.  Usaremos la batidora para conseguir una mezcla las más homogénea posible.
Lo último que añadiremos será el sobre de levadura. Y volveremos  a mezclar bien. Colocar la masa sobre el molde y meter en el horno durante 30-35 minutos . El biscocho estará hecho cuando pinchemos con un cuchillo y la punta salga limpia.